BAOBAB (ADANSONIA DIGITATA)

Árbol de singular aspecto que crece en las regiones áridas del África Central. Si bien su altura no es excesiva (nunca sobrepasa los 20 metros), el voluminoso tronco llega a medir 10 metros de diámetro y se ramifica con numerosas ramas horizontales. Las cavidades que tiene en la blanda y esponjosa madera se llena a veces con el agua que el vegetal absorbe por medio de sus raíces, muy hundidas en la tierra. El árbol emplea esta agua durante la estación seca (principios de marzo hasta octubre).

Las fibras que forman la capa interna de la corteza, de color gris rojizo, se emplean en la confección de cuerdas y tejidos. Las hojas del árbol recuerdan las del castaño de Indias y sus lúcidas flores, de un tono cremoso, huelen como ciertas variedades de melón y producen un fruto semejante a una calabaza, el cual puede alcanzar los 30 centímetros de diámetro. Cada uno de estos frutos contiene 30 semillas, aproximadamente, en forma de riñón, bañadas por un jugo pegajoso.
Pertenece a la familia de las bombáceas, que también comprende el árbol de madera de balsa y otros tropicales de troncos extraños y flores de aspecto llamativo. Dan fruto de forma poco común.
El capoquero (Ceiba pentandra) de Sudamérica, de las Antillas y del sur de Asia, alcanza los 30 metros y da frutos en forma de pepinos de 7 a 20 centímetros de longitud. De las semillas se obtiene el capoc, especie de lana para colchones y almohadas. Su macizo tronco está erizado de espinas, y de su base parten radialmente numerosas raíces comprimidas. El algodonero arbóreo (Chorisia spp.) de Centro y Sudamérica, tiene fama por sus grandes flores blancas, rojas o rosadas, como las del lirio.
Una especie brasileña es comúnmente llamada árbol botella a causa de que su grueso tronco a menudo tiene un estrechamiento característico.
El bongo (Cavanillesia platanifolia) es árbol muy grande de Panamá y Colombia. Su madera es más liviana que la del árbol de madera balsa, aunque no se emplea tanto.
El algodonero rojo (Bombax malibaricum), del trópico americano y asiático, es muy parecido al capoquero, pero tiene unas vistosas flores de color carmesí con anchura de 10 centímetros aproximadamente.
En los trópicos americanos crece el castaño de Guinea (Pachira aquatica) que da frutos en forma de calabaza y contienen unas semillas parecidas a las castañas. A diferencia de otros árboles de la misma familia, estas semillas no están cubiertas por una cápsula sedosa. Las flores de algunos miembros de la familia del algodonero tienen una semejanza grande con una brocha o cepillo d vivos colores.